4 de septiembre: ¡Nos embarcamos rumbo a Alemania!

¡Al fin estamos en Alemania! Después de poco más 28 horas de viaje, entre vuelos, escala y tren, hemos llegado a nuestro primer destino, Köln. El viaje fue muy bueno, a pesar del tiempo que demoramos. 

Primero, un vuelo a Sao Pablo, en Brasil. Ahí, como pasajeros en tránsito, esperamos nuestro siguiente avión en el mismo aeropuerto. Aprovechamos de conversar con nuestras familias, caminar y, por supuesto, enterarnos del resultado del Plebiscito en Chile. 

 El viaje de noche sobre el Atlántico fue muy bueno. Casi todos pudieron dormir varias horas y recuperarse para hoy día. De a poco fue bajando la ansiedad y nos fuimos organizando como grupo. ¡Nuestra estrategia de respuesta a la orden de “Mirense” funcionó a la perfección! Cada uno de nosotros tiene que responder a ese llamado buscando a un compañero/profesor designado para todo el viaje. Es la manera de que nadie se quede atrás y que cada vez que debamos caminar o salir de algún lugar, estemos todos. 

 Llegamos a Frankfurt aproximadamente a las 17:00, hora local, y desde ahí mismo tomamos el tren rápido hacia Köln. Llegando a la Estación Central y, por un rato, nos detuvimos a admirar la Catedral, Luego, en metro, nos acercamos al hotel. ¡Fue nuestra primera “prueba de fuego” de movilizarnos, caminando y subiendo y bajando de diferentes transportes, con todas nuestras maletas a cuesta! 

 Los alumnos han ido aprendiendo a mirar las pantallas con los horarios y destinos en el metro y trenes. También han validado sus tikets en el metro y, a esta hora, salieron todos juntos a recorrer los alrededores del hotel. 

El grupo ha demostrado ser muy respetuoso, no solamente entre ellos, sino también en su actitud en los espacios públicos, acatando las normas de cada lugar. A pesar del cansancio, han mantenido su entusiasmo y alegría y, los hombres, han demostrado su caballerosidad y consideración ayudando a sus compañeras con las maletas en las subidas y bajadas de escaleras. 

En el hotel, muy cómodo y lleno de jóvenes, nos estaban esperando con comida. Aprovechamos de ponernos de acuerdo en las normas básicas, destacando el hecho de que cada uno es corresponsable con el otro. También hablamos de cómo debíamos cultivar la confianza entre todos, de manera de que nadie se vea expuesto a situaciones que debemos atender o prever. 

 Personalmente, como profesora acompañante de este grupo, fue un día muy gratificante, y una oportunidad de conocerlos mejor, Creo que va a ser una gran experiencia para todos nosotros. 

 Felicitaciones a los padres, tienen hijos muy receptivos y con una gran disposición. 

 Mañana será un día para recorrer Köln. Visitaremos la Catedral y sus alrededores y, estoy segura de que será, nuevamente, una gran experiencia para todos nosotros.

 Les dejo algunas fotografías del viaje. Saludos

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